Recientemente acudí a una sala de cine para ver la reciente
película “Noé” de Darren Aronofsky con la intención de quitarme las dudas de
tantos comentarios negativos que surgieron en torno a su presentación antes de
que se estrenara en cines, y la verdad creo que los comentarios negativos que
se rumoraban en la internet se quedan cortos comparados a lo que cualquier
persona no muy conocedora de la Biblia puede captar al ver la película